Nigel Hall (Bristol, Reino Unido, 1943) se especializa en obras tridimensionales de madera pulida o acero, explorando la relación entre espacio, masa y línea. Sus creaciones abstractas y esculturas geométricas destacan tanto los vacíos y sombras como la solidez del material, transformándose con la luz y el punto de vista. Destaca el vacío como elemento esencial para esculpir formas lineales y geometría marcada, logrando una incorporación sutil de la escultura en el espacio.
La pieza, visualmente ligera y dinámica, presenta un tambor equilibrado perforado por anillos elípticos, que sugieren sombras en diversas fases de progreso. La esencia de sus esculturas inspiradas en las sombras se revela a medida que el espectador se desplaza, generando cambios en las relaciones de luz y sombra, movimiento y quietud, constricción y expansión.